Divorcio y las hipotecas ¿Qué pasa con los bienes, cómo se reparten?

Muchos matrimonio deciden tramitar un crédito mancomunado o con ingresos adicionales para poder comprar propiedades de mayor valor, las cuales no podrían comprar haciendo el trámite solo con sus ingresos personales. Cosa que está muy bien, pero el incremento en la tasa de divorcio que se vive en México está haciendo que las cosas se compliquen cada vez mas, especialmente cuando se tienen que repartir los bienes entre los dos esposos que se están separando.

En caso de una separación, hay varios puntos que se deben tomar en cuenta cuando hay divorcio y las hipotecas están de por medio. Para definir  la forma en que se repartirán los bienes, hay que analizar varios factores como son: La forma en que están casados (bienes separados o mancomunados), el momento en que fueron comprados los bienes (antes o después de casarte), si se compró antes de casarse hay que verificar si los bienes fueron o no incluidos en el matrimonio o no, entre algunos otros factores.

Si la hipoteca la adquirió uno de los cónyuges ANTES de casarse, entonces el bien inmueble es propiedad de quien lo compró, sin importar si se casa por bienes mancomunados o separación de bienes,  a menos que en el acta de matrimonio se estipule que el dueño de la propiedad quiere agregarlo a la sociedad conyugal y compartir la propiedad con su espos@, declarándolo como parte de lo que cada cónyuge aporta.

Si la propiedad es adquirida DESPUÉS de casarse, dependerá de la forma en que están casados para determinar quién es el dueño de la propiedad en caso de divorcio, además de que se debe validar si se utilizó el crédito de uno solo de los esposos o si cada uno participó con su propio crédito.

Si el crédito es posterior al matrimonio y se casaron por bienes separados, entonces la casa será propiedad de quien tramitó el crédito, a menos que la otra parte del matrimonio aparezca en la escritura como co-acreditado, en cuyo caso les pertenece a ambos la casa.

En caso de divorcio, si el crédito es del tipo conyugal, mancomunado, ingresos adicionales o donde los dos pagan un mismo crédito o cada quien tiene su crédito y paga esa parte, entonces la cosa cambia, pues sin importa la forma en que se hayan casado, la propiedad será de ambos al 50% aunque estén casados por bienes separados.

En caso de matrimonio por bienes separados y si los dos están pagando el crédito pero uno de ellos tiene el crédito con el 90% de la deuda y el otro solo el 10% entonces, se necesita liquidar ambos créditos, para poder repartir en la proporción que corresponda o acuerden en el proceso de separación.

En caso de divorcio de una sociedad conyugal o mancomunado, para poder finiquitar el matrimonio es necesario que los esposos (en proceso de ser ex-esposos) deben llegar a un acuerdo sobre cómo dividir los bienes muebles e inmuebles. Y si no se ponen de acuerdo, la ley establece que cada bien se venderá y el dinero obtenido por la venta se repartirá mitad y mitad, es decir 50% para la esposa y 50% para el esposo.

Lo anterior aplica para los bienes que se compraron de contado o que ya te terminaron de pagar, pues hay una diferencia  cuando hay un crédito hipotecario o crédito sobre el bien a dividir: inmediatamente después de vender el biene, se debe pagar lo que se deba al banco, financiero o sofol, y lo que sobre es lo que se repartiría entre las dos partes.

divorcio y las hipotecasEl divorcio no es cosa fácil, pues implica un proceso muy doloroso y agotador, tanto física como mentalmente, además de que no hay un ganador pues las dos partes pierden, y si hay hijos es más complicado todavía. Ojalá no fuera un tema cada día mas frecuente en este nuestro México, pero son temas que hay que conocer para tomar mejores decisiones.